HALLAZGO

El diseñador Pepe Cruz es el hombre que estaría interesado en comprar una parte del botín

LA VANGUARDIA

BARCELONA

17/09/2022 15:52ActualizadO

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Toño Piñeiro es un hombre de Sober, un municipio de la zona rural de Lugo, que vive en Valencia, pero que quiere jubilarse en su tierra natal. Por eso compró una casa en un pueblo prácticamente desierto y, al rehabilitarla, hizo un descubrimiento inesperado: encontró varios botes de Nesquik llenos de pesetas escondidos por toda la casa. 

En total, tal y como publicó el diario El Progreso, Piñeiro encontró nueve millones de pesetas, lo que supone unos 54.000 euros, pero no ha podido cambiarlos porque el Banco de España ya no acepta la antigua moneda española: «He llamado para ver si los pudiera cambiar y me han dicho que no». Así que no le ha quedado más remedio que encontrar compradores. 

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Piñeiro ya ha encontrado un posible comprador para todo este dinero. Tal y como explica el Diario de Pontevedra, el diseñador Pepe Cruz es el hombre que estaría interesado en comprar una parte del botín en pesetas que se ha encontrado en Lugo, que consta de una serie de billetes de 200, 500, 1.000, 2.000, 5.000 y 10.000 pesetas que se pusieron en circulación entre 1979 y 1985.

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Fuente: Atlas

Al parecer, estas pesetas, que pertenecieron a un hombre que murió sin herederos, fueron diseñadas por José María Cruz Novillo, que no es otro que el padre de Pepe Cruz: «Mi padre le había comprado al Banco de España billetes de la primera hornada, pero gran parte nos los robaron a principios de los 90 y otros se fueron deteriorando por la humedad». 

El descubridor de los billetes se guardará uno de cada valor. Sin embargo, venderá el resto a un precio que variará según sus numeraciones y el estado de preservación en el que se encuentren. Si la opción de Cruz finalmente acaba fallando, o no compra todo el lote a la venta, ya tiene a otro interesado: un coleccionista canario. 

Es la segunda vez que le ocurre

Piñeiro ya es prácticamente un experto en encontrar este tipo de tesoros. Al menos en su nueva casa. Este hombre gallego ya encontró cinco millones de pesetas, alrededor de 30.000 euros, que sí pudo cambiar en el Banco de España. 

En aquel momento le sirvieron para echar abajo el techo la casa donde, tras un tiempo, ha vuelto a encontrarse una gran