BARCELONA APRUEBA UNA TASA TURÍSTICA PARA EXCUSIONISTAS

La polémica tasa turística para los excursionistas que visitan Barcelona pero no pernoctan en ella ha empezado a cobrar forma. La Comisión de Economía y Hacienda ha aprobado una proposición del grupo Demócrata para «implantar una nueva tasa municipal a operadores turísticos por la modalidad de ‘visitante de día’ con el objetivo de regular el uso del espacio público». El objetivo es que entre en vigor el próximo año.
El equipo de gobierno de Ada Colau ha defendido desde el minuto cero de su mandato la creación de un gravamen para cualquier turista de paso, ya que se calcula que de los 30 millones de viajeros que pisan Barcelona solo la mitad pernoctan y por tanto pagan el impuesto que estableció el Govern hace cinco años en los alojamientos. Pero el resto de visitantes contribuye si cabe aún más a la saturación turística de la capital catalana, ya que en apenas unas horas generalmente visitan intensivamente los iconos turísticos y el centro de la urbe.
Articular esa nueva tasa no es fácil, por lo que hasta ahora el único paso en firme había sido la reciente implantación de una tasa para los cruceristas en escala (menos de 12 horas), donde el control de llegadas es claro y el cobro es fácil. Esta medida se aprobó en abril como ley de acompañamiento de los presuestos de la Generalitat y es la administración autonómica quien la gestiona: 0,65 euros por persona y día.
La nueva tasa, en cambio, será únicamente municipal. Se da por hecho que una forma de cobro se vehiculará a través de autocares de turoperadores que aparquen en la ciudad, aunque están por determinar otras medidas para que sea lo menos discriminatoria posible, dado que miles de visitantes llegan por otras vías.
La aprobación de la proposición del grupo Demòcrata ha contado con el apoyo de Barcelona en Comú, PSC, ERC, CUP y el concejal no adscrito Gerard Ardananuy, y con la abstención PP y Ciutadans.