BENIDORM PIERDE OTRO PEREZ DEVESA

MULTITUDINARIO SEPELIO

MAS DE MIL PERSONAS PASARON POR LA CAPILLA ARDIENTE PARA DAR SU ULTIMO ADIOS

Maesba

               Nuestra ciudad ha perdido a otro de sus hijos predilectos, distinguido y querido, MIGUEL PEREZ DEVESA. Fue el alcalde y se distinguió con notables Ee importantes obras de infraestructura.

             No era una época de calma, políticamente, ya que se sabía que el Jefe del Estado estaba muy enfermo y se iría a pasar de una dictadura y una democracia. Supo capea este remolino y salió muy airoso de su cometido como primera autoridad.

     Sus apellidos, PEREZ DEVESA, son relevantes y emblematicos en la ciudad y gozan del cariño y respeto de todos los ciudadanos. Su hermano pequeño, Vicente, falleció en el 2006, también fue alcalde local. Pepe, otro de los Pérez Devesa, fue el único que no se inclinó por la política y se dedicó, lo sigue haciendo, al negocio familia, “BENIPAN”.

El PEREZ DEVESA que hoy nos deja era médico, junto con su esposa Rosa, y gozaba de un gran prestigio profesional en la que no falto su gran humanidad en el favorecimiento de los más necesitados en atenciones médicas.

   El matrimonio, ROSA-MIGUEL, tuvieron siete hijos, una hija falleció, quedando seis que siempre han estado muy unidos y todos ellos gozan de una importante relevancia en la villa.

Miguel era una persona tratable y gozaba de un gran sentido de humor y de cordialidad. Recuerdo que era un gran aficionado a la caza y dedicaba tiempo a este deporte.

   Personalmente lo conocí cuando estudiaba en Valencia, hablo de los años 50. Yo, con sus primas hermanas, hijas del Tío Tomas,( Pepita- Marianita y Vicenta) solíamos ir a la panadería, allí conocí a Pepe, (Miguel estaba estudiando en Valencia) y a Vicente que era un chiquillo de seis o pocos años más. Digo esto para que se sepa que mi relación personal con los PEREZ DEVESA es de décadas antes de venirme a vivir a Benidorm.

Para mi desgracia y pesar tuve, por mi profesión, un duro enfrentamiento con el MIGUEL PEREZ DEVESA político que, después de muchos años, pudimos hablar de tú a tú y su gran corazón y buen hacer dio como resultado restablecer una amistad que nunca debí perder, pero las circunstancias y los malos consejos nos cogió a ambos, así lo creo, en medio y rompimos lo que siempre nos había unido, la amistad y el respeto.

Tengo que decirlo y no me duele prenda al hacerlo. Tengo 86 años, me hablo con todos los Pérez Devesa, con dos hijos de Miguel sobre todo, y quisiera, antes de que salga mi número en la tómbola de la muerte, que la viuda de Miguel, ROSA, me perdonase por el daño moral, como madre y esposa, le cause. En mi descargo añadiré que yo tenía detrás de mí a seis hijos, esposa y a más de 30 empleados, que me obligaba a defenderme, no de Miguel, sino del brutal perseguimiento que fui objeto por parte de Diego y Juan Antonio.

Hoy he llorado, ¡de veras!, la muerte de Miguel porque supo entender el problema, así lo reconocimos cuando hablamos y volvimos a ser amigos. Ahora solo me falta que su viuda, ROSA, lo entienda y me perdone.

Se y me consta que hoy, MIGUEL y VICENTE están juntos en la Gloria, con el Tío Tomas, Marianita(hija del Tío Tomas) también, Juanita, mi mujer, formen una tertulia y hablen de todas estas cosas que nos separó durante años.

¡Miguel!  yo no te digo adiós, sino hasta luego.