Alfaz del Pi

»El sexo va mejorando con la edad, como el buen vino»

VIDAS APASIONADAS

Se conocieron en clase de catalán con sus dos vidas a cuestas y Anna y Goyo acabaron redescubriéndose y redescubriendo sus pasiones entre largos paseos, rutas en bici y en la cama

Prado Campos21 abril, 2021 – 8:51PlayUnmuteCurrent Time 0:29/Duration 1:19Loaded: 100.00% Picture-in-PictureFullscreen

En la vida hay momentos rutinarios, de esos que pasan desapercibidos en la vorágine diaria, que se convierten en los verdaderamente importantes y te cambian la vida. Ese compañero que se sienta en la mesa de al lado y con el que intercambias miradas de complicidad. Esa amiga con la que compartes confidencias tomando una cerveza a la salida de clase. Esos planes por la ciudad que te hacen conectar con nuevas pasiones que no sabías que tenías. Las clases de catalán representaban esa normalidad para Anna y Goyo, dos compañeros que se hicieron amigos, empezaron a redescubrirse junto al otro entre largos paseos por Barcelona, rutas en bici y charlas sobre sus respectivas vidas amorosas y acabaron convirtiéndose en pareja. De esto hace casi una década. 

Lo cierto es que esta historia la podría firmar cualquier pareja veinteañera o treintañera, pero no es el caso de Anna y Goyo. Allá por 2003 él acaba de llegar a Barcelona y tenía una relación con su pareja de entonces. Ella tenía a su espalda varias aventuras amorosas y un ex con el que había tenido una hija que hoy está en la treintena. En 2011 Goyo se separa y su amistad y los planes que cada vez comparten con más frecuencia les llevan a la cama y a comenzar una relación que dura hasta hoy. La diferencia está en que ambos saben que la edad les ha dado una perspectiva y una pasión para afrontar su relación que no tenían cuando eran jóvenes. 

“Creo que el sexo fue lo que cambió o determinó que pasáramos de una relación de amistad a una de pareja. Cuando empezamos a tener intercambios sexuales fue cuando nuestra relación dio un giro”, cuenta Goyo. Anna lo confirma: “Confluimos en un punto sexual. Nos apetecía, teníamos ganas y así empezamos. Creo que él empezó a seducirme [“yo le empecé a tirar los tejos”, apostilla su pareja] de una forma muy agradable, con actividades, planes y cosas nuevas”. Anna y Goyo son unos de las protagonistas de la nueva campaña de Pikolin Haz algo que te quite el sueño, con la que la célebre marca de colchones quiere derribar uno de los últimos tabúes en torno a los mayores: el del sexo. Porque, como defienden, lo importante en la vida es vivirla con pasión. 

«Ahora el sexo es de más calidad. Cuando eres joven tienes más fogosidad, pero también más torpeza«

Anna y Goyo se comen con los ojos mientras habla el otro, asienten a sus palabras y ríen a carcajadas compenetrados. “El sexo va mejorando con la edad, como el buen vino. Lo vas cocinando y amasando hasta que consigues buenos resultados”, confiesa Anna. “Creo que ahora el sexo es de más calidad que cuando era más joven. Cuando eres más joven, tienes más fogosidad y más carga hormonal, pero también más torpeza. No es de tan buena calidad. El sexo tiene que ser algo divertido y otra clave es que te excite que la otra persona se excite. Eso da gasolina para el sexo”, coincide Goyo ante la risas de su pareja.

Al igual que ellos, el 91% de los españoles defiende que, con la edad, en el sexo se prefiere la calidad a la cantidad, según los datos del estudio Seniors, Pasión y Sexo, realizado por Pikolin, entre mayores de 60 años. La encuesta también confirma que el sexo, el deseo, la pasión y la vitalidad no entienden edad porque para dos de cada tres es un tema igual o más importante que hace años y el 68% confirma que lo disfruta en igual o mayor medida. Además, el 82% reconoce estar satisfecho con el sexo e incluso un 54% dice estar muy satisfecho.

De igual modo, el último estudio de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) también revelaba que el 60% de los mayores de 65% de nuestro país son sexualmente activos y tienen relaciones cuatro veces al mes. A pesar de ello,  el estudio de la marca de colchones zaragozana deja claro a que un 65% de los españoles mayores de 60 años les gustaría poder hablar más abiertamente de sexo, pero creen que es algo que está mal visto con la edad. Ante esta realidad, el interrogante es por qué sigue siendo un tabú hablar del sexo en los mayores. 

“El sexo es una parte importante en nuestra relación. Tiene bastante peso”, confirma Goyo, quien añade que para él debe ser “divertido y con variedad. Creo que en las relaciones sexuales no hay reglas, siempre y cuando los dos acepten lo que sean”. “Tiene que haber sexo, siempre. Eso sí, imaginación al poder”, agrega Anna. “Conforme van pasando los años evolucionas sexualmente. Considero que tiene que haber sexo siempre en una relación de pareja: sexo de calidad, en el cual los dos aporten y haya una entrega. Es un apartado tan importante como el diálogo o la convivencia. Es un eje más de la relación”.

Lo que sí tiene claro esta pareja es que los años son sinónimo de experiencia y de autoconocimiento en todos los aspectos de la vida, también en el del deseo. “A los 25 años sabía poco de sexo y mis parejas eran muy desafortunadas. Cuando me separé, decidí que yo quería pasármelo igual de bien que mi pareja y fui más rigurosa: si tenemos que hablar, lo hacemos y lo que me des, me lo tienes que dar bien. Además, mi nivel sexual ha sido más de mayor. He tenido más ganas que de joven, cuando prácticamente no me apetecía nunca. Yo lo achaco a la calidad de entonces y a la de ahora. Si tienes buena calidad, te apetece más”, remata Anna.

«Tiene que haber sexo, siempre. Eso sí, imaginación al poder«

Eso sí, ambos coinciden en que el sexo pasional y desaforado de la juventud no es su prioridad ahora. “Considero que está muy bien cuando estás mucho en ayunas. Ese sexo está bien pero no es el buen sexo. Te lo puedes pasar muy bien, pero yo prefiero que me conozcan y conocer y que haya una relación de confianza. Ese es el buen sexo para mí”, matiza Anna. Y Goyo le da la razón porque, dice entre risas, “normalmente es un sexo torpe. Es un poco azaroso”.

Hoy Anna y Goyo viven juntos y afirman que han “trabajado” todos los aspectos de su relación para estar donde están. “Veníamos de mundos muy diferentes y, al juntarnos, evidentemente, ha habido cosas que hemos tenido que ir trabajando para aunar”, explica Goyo. “Hemos verbalizado qué pareja queríamos ser porque hay mil tipos de pareja y todas pueden funcionar. En esto no hay reglas. Hemos hablado mucho sobre qué queremos y por dónde teníamos que trabajar. Y todavía seguimos. Yo creo que el trabajo de pareja es de por vida”, añade Anna.

Confiesa que, a pesar de que vivir solo está muy bien, la vida en pareja le ha enriquecido y mejorado. “La pareja te da el poder compartir, poder reír juntos, hacer cosas juntos. También tienes que renunciar a cosas, pero poniéndolo en una balanza, creo que la vida en pareja gana”, concuerda Goyo. Esa es la otra pasión que han reencontrado juntos: la de la pareja, la de ir a pasear, a montar en bici, escaparse a la playa o a la montaña, la del deseo sexual y la de labrarse un presente y un futuro juntos. Porque, en el fondo y como decía Jacinto Benavente, “si la pasión, si la locura no pasaran alguna vez por las almas… ¿Qué valdría la vida?”.

Injubilables y apasionados: así son los seniors en la cama

Una escena en la cama con una pareja que peina canas. Las risas se entrelazan como sus cuerpos. Su piel deja ver el paso del tiempo pero también las ganas de pasarlo bien. De disfrutar de la vida y del deseo, de la ilusión y la pasión. El sexo sigue siendo uno de los tabúes más extendidos cuando hablamos de las personas mayores de 60 años. Tanto es así que el 68% de la generación boomer se siente silenciada en temas relacionados con el sexo y la pasión y el 89% cree que a la gente joven le da vergüenza hablar de sexo con personas de su generación.

Estas son algunas de las principales conclusiones del el estudio Seniors, Pasión y Sexo, realizado por Pikolin, entre los españoles de más de 60 años. Para darles voz y visibilizar a todos aquellos mayores que viven apasionadamente su vida, la marca de colchones ha creado la campaña Injubilables, en el que cuentan las historias reales de Danielle y Rosa, de Isabel o de Goyo y Anna. Ellos, como la gran mayoría de los integrantes de la llamada generación silver, representan las ganas de vivir y de disfrutar de la vida con pasión. Y, claro está, el sexo es una parte fundamental de cualquier vida con independencia de la edad. Y lo dejan claro: dos de cada tres defiende que la pasión y el sexo son igual o más importantes que hace unos años y solo un 24% se considera una persona sexualmente poco activa.PlayMuteCurrent Time 0:02/Duration 0:40Loaded: 97.89% Picture-in-PictureFullscreen

Estas son algunas de las principales conclusiones del el estudio Seniors, Pasión y Sexo, realizado por Pikolin, entre los españoles de más de 60 años. Para darles voz y visibilizar a todos aquellos mayores que viven apasionadamente su vida, la marca de colchones ha creado la campaña Injubilables, en el que cuentan las historias reales de Danielle y Rosa, de Isabel o de Goyo y Anna. Ellos, como la gran mayoría de los integrantes de la llamada generación silver, representan las ganas de vivir y de disfrutar de la vida con pasión. Y, claro está, el sexo es una parte fundamental de cualquier vida con independencia de la edad. Y lo dejan claro: dos de cada tres defiende que la pasión y el sexo son igual o más importantes que hace unos años y solo un 24% se considera una persona sexualmente poco activa.

#ParejaApasionada, una campaña para inundar la Red de fotos de mayores apasionados

Si uno googlea pareja apasionada y busca en las imágenes que ofrece el buscador, descubrirá una única estampa: jóvenes espectaculares en actitudes íntimas. Pero, ¿solo tienen sexo ellos? Para romper el tabú de que la pasión es una cosa exclusiva de jóvenes y acabar con el prejuicio hacia los mayores y su intimidad, Pikolin ha puesto en marcha la iniciativa #ParejaApasionada con la que pretende inundar internet y las redes sociales de imágenes de mayores apasionados y demostrar que para la pasión, el amor y el sexo no hay edad. Ha llegado el momento de romper el tabú.