ESPAÑA

Fuentes jurídicas y policiales apuntan la endeblez de la identificación del expresidente con ese mote

La Unidad de Asuntos Internos trabajó con la hipótesis de que el ministro estuviese tras ese mote

Javier ChicoteSEGUIRIsabel VegaSEGUIR

MADRID 

NOTICIAS RELACIONADAS

• El juez investiga si el marido de Cospedal recibió «chivatazos» de Villarejo
• El Congreso arrincona al PP y avala investigar la Operación Kitchen

Un informe de la Unidad de Asuntos Internos recientemente incorporado al sumario de la Operación Kitchen revela que durante buena parte de la instrucción, se trabajó con la hipótesis de que la persona a la que Villarejo y su clan se referían como «El Asturiano» podía ser el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz, si bien trabajos posteriores del mismo equipo investigador acabaron acotando que tras el mote se encontraba el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy. Fuentes policiales y jurídicas consultadas por este diario cuestionan esta atribución.

Un informe de Asuntos Internos del 29 de octubre de 2018 elaborado a partir de los audios por los que fue abierta la pieza sobre Kitchen «colige» que la operación se

 habría desarrollado «con conocimiento del «Asturiano», lo que motivó que un mes después, el juez, a instancias de la Fiscalía Anticorrupción, solicitase a los investigadores que identificasen a las personas que Villarejo escondía detrás de esos motes.

A resultas, la policía elaboró un informe con sus primeras conclusiones a partir de los audios analizados: el «Asturiano» «ocuparía una posición de jerarquía o influencia respecto al entonces Secretario de Estado de Seguridad», Francisco Martínez, y tendría capacidad para promover el cese del entonces Jefe de la Unidad de Asuntos Internos, Comisario Principal Marcelino Martín Blas».

Apuntaba además que Martínez «habría ejercido como intermediario» entre Villarejo y la persona oculta tras el mote y que, en todo caso, el polémico policía parecía tener información comprometedora sobre él.

Con estos parámetros, podrían ser tanto Rajoy como Fernández Díaz y la investigación se inclinó sobre el segundo cuando se contrastaron dos audios de Villarejo sobre el mismo tema en los que se refería al mismo individuo como «el asturiano» y «el ministro».

«Parte de la información atribuida al «Asturiano» se detalla de un modo similar en otros extractos, esta vez con referencia al «Ministro», siendo en aquel momento el Ministro del Interior (superior inmediato de Paco) Jorge Fernández Díaz, quien con anterioridad había desempeñado el cargo de Gobernador Civil de Asturias», decía aquel informe.

Se trata de un audio en el que Villarejo departe con su amigo el empresario Adrián de la Joya y le cuenta una historia que ya había comentado a otros interlocutores. Le explica que presionó para quitarse de encima al entonces jefe de Asuntos Internos Marcelino Martín Blas y lo hizo amenazando con «levantar el pie» sobre Esperanza Aguirre en una causa que tenía abierta por un asunto de tráfico y en la que una asociación del clan ejercía la acusación después de «montarle el delito».

En la charla con este empresario, fechada el 16 de febrero de 2017, Villarejo le cuenta a De la Joya que tuvo que«amenazar a Paco y al ministro con lo del tema de Marcelino para que le cortaran la cabeza». «Así es que, mañana quiero a este tío cesado… Claro. Y se lo dices al Ministro que si no, él también va para delante, que cuando he estado hablando con él también lo tengo inmortalizado, cuando me ha dado instrucciones en Cataluña. Entonces, mañana lo quiero cesado».

La cuestión es que en el sumario obraba ya una conversación muy similar con otro de los habituales en el círculo de Villarejo, el también empresario Alberto Pedraza, al que le cuenta lo mismo pero esta vez, refiriéndose al «asturiano» en lugar de al «ministro».

«Un día empiezan las hostias con el Marcelino y digo dile al tonto polla del Asturiano que o me quitan al Marcelino o le levanto el pie a la Esperanza», señaló, para después añadir: «Luego, como sequía el Marcelino dando por culo cogí al Secretario de Estado, a Paquito el Chocolatero, le dije, Paco, el Asturiano me lo llevo por delante dile que tal si no mira, un juicio, óyete, mira lo que estás hablando», dice la transcripción de esa charla, que se produce un día después, el 16 de febrero de 2017. Tiene más lógica que para exigir el cese de un alto mando policial se refiriera al ministro del Interior que al presidente del Gobierno.

Las pesquisas siguieron avanzando y la Unidad procesando más audios y documentación. En un informe ya del pasado mayo sobre nuevas conversaciones, la policía incluye el siguiente párrafo: «Finalmente, subrayar que Villarejo identifica a la persona a la que apodan el Asturiano como el ‘Barbas’, en alusión a Mariano Rajoy Brey, presidente del Gobierno de España desde el 21-12-2011 al 02-06-2018, circunstancia que permanecía hasta el momento sin determinar de forma indubitada y sobre la que se emitió requerimiento de su Juzgado».

De hecho, los informes relataban que la operación Kitchen estaba «encaminada a la localización» de «documentos y archivos de audio comprometedores con dirigentes del Partido Popular», habría tenido «un resultado positivo y estaría coordinada por el entonces Secretario de Estado de Seguridad (con conocimiento del «Asturiano» y del «Largo»)», dos motes que utilizaba el comisario y que los investigadores tenían «plenamente identificados» con Mariano Rajoy y al abogado Javier Iglesias, respectivamente.

Con todo, las fuentes policiales y jurídicas consultadas por ABC inciden en que la atribución a Rajoy del mote «el Asturiano» aún es endeble, pues si bien no cabe duda de que era a él a quien el clan se refería cuando hablaba de «el Barbas», el otro sigue generando dudas.