La procesada fue soprendida hasta en cuatro ocasiones vulnerando el confinamiento y el juez la considera culpable de un delito de desobediencia grave
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Una compra a 45 kilómetros de su casa en pleno e stado de alarma por el coronavirus que le ha resultado especialmente cara. El Juzgado de Instrucción número 1 de Torrevieja ha condenado a cuatro meses de prisión por un delito de desobediencia grave a la autoridad a una mujer que fue interceptada por la Guardia Civil hasta en cuatro ocasiones cuando se dirigía a Elche a comprar, pese a ser residente en Torrevieja (una ciudad situada a 45 kilómetros).
La sentencia, dictada tras la celebración de un juicio rápido en el que la mujer reconoció los hechos y alcanzó un acuerdo de conformidad con la Fiscalía, contempla la suspensión de la pena de prisión a condición de que la condenada no vuelva a delinquir durante dos años, de acuerdo con la información suministrada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV).
Según las mismas fuentes, los hechos sucedieron a las nueve y media de la mañana del 11 de abril en la carretera CV 905, que une Torrevieja con la Autopista del Mediterráneo, cuando la condenada fue requerida por la Guardia Civil de Tráfico para que justificara el motivo de su desplazamiento.
La mujer dijo que iba a Elche a comprar, la misma excusa que ya había usado tres veces los días 31 de marzo y 8 y 9 de abril. En las tres ocasiones los agentes le advirtieron que su actuación incumplía el decreto del estado de alarma.
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