En las proximidades de San Rafael en Mendoza, Argentina, un auto llamó la atención de un vehículo policial que se encontraba resguardando que se respetara a rajatabla la cuarentena interpuesta por el presidente Alberto Fernández, desde el 20 de marzo, en todo el territorio para prevenir el coronavirus.

Al acercarse al automóvil, los efectivos policiales se percataron de que no estaba abandonado y que en su interior se encontraban el sacerdote de Villa Atuel, localidad cercana a la ruta 171, acompañado por una mujer de 39 años. Cuando le solicitaron las explicaciones correspondientes del caso, el párroco se justificó señalando que había escogido ese terreno contiguo al camino para estar más tranquilo junto a su acompañante, puesto que le estaba brindando contención espiritual a raíz de que atravesaba problemas familiares.

Las excusas no le sirvieron a la pareja, puesto que ambos violaron el aislamiento preventivo y obligatorio, por lo que quedaron detenidos en la comisaría 64ª. El cura y la mujer con el correr de las horas fueron liberados, tras ser notificados de la causa.

En Villa Atuel, el hecho causó conmoción. Medios locales buscaron al sacerdote Fabián Pezo para saber de primera fuente sus impresiones. El respondió que se arrepentía “por la imprudencia, pero no fue algo malintencionado”.

Según señala TN.com.ar, el cura de la Parroquia Inmaculada Concepción insistió que acompañó a la mujer para realizar unos trámites y de regreso ella le pidió que se detuvieran para poder hablar sin la presencia de su padre. “Nos pusimos a un costado de la ruta. Ella estaba dentro del auto porque tenía frío y yo sentado en un banquito afuera con la sotana arremangada dentro de la campera, es la costumbre porque si no se ensucia con la tierra”.

Hasta el momento, solo en la zona de Mendoza han sido aproximadamente 3 mil los ciudadanos detenidos por incumplir el periodo de cuarentena, e incluso más de 100 los que se encuentran recluidos por reiterar este delito o por contar con otros antecedentes judiciales.