Benidorm

Conferenia de CHEMA ARZUAGA.- “El optimismo perpetuo es un multiplicador de fuerzas”

“El Faro de Alejandría Benidorm” ofreció su acostumbrada charla-debate, el pasado 21 de mayo en La Casa del Fester.

En esta ocasión fue impartida por Chema Arzuaga Moreno, médico de familia. Poseedor entre otros estudios, de master en gerontología por el Dpto. de psicología de la facultad de medicina de Alicante.

A las 18´30 horas comenzó contando entre ilustraciones y una buena oratoria, algunas de tantas experiencias y vivencias que a diario surgen en su consulta. Dirige una pregunta al auditorio, ¿Vivimos la vida como si solo tuviéramos una? ¡Ojo! es lo más caro y valioso que tenemos en el mundo y es gratis. El ponente argumenta éste y otros puntos que fue tratando.

Citó a una fundación que se dedica a medir la alegría o felicidad de distintos países del mundo, utilizando los mismos criterios. España está en el número 37, hay otros países más felices aun teniendo una renta Per cápita más baja que la nuestra, es el caso de Costa Rica, es el más feliz de Sur América. Ecuador ocupa el puesto 48 y Japón el 54. En España consumen tranquilizantes un 10.7% y antidepresivos un 5.6%. Galicia y Asturias son las ciudades más destacadas en estar más tristones. Navarra y Baleares aparecen como los más felices en estos estudios, donde Influyen muchos factores aparte del dinero o los recursos.

También explica una serie de características que impiden que la gente viva bien. El doctor da algunos ejemplos propios: el síndrome del adolescente perpetuo (SAP). Algunos se creen el ombligo del mundo, disponen de la razón, con licencia para cometer errores, no toleran opiniones de expertos, solidaridad engañosa egocéntrica, y desordenados en sus vidas. Actúan de forma toxica, aunque se espera que maduren muchos no lo logran y, surgen los problemas con todo y con todos, son de pocos amigos. Contaminan los ambientes equilibrados. Desarrollan una conducta agresiva. En el fondo están frustrados y tienen mal tratamiento.

Síndrome de la prisa permanente (SPP). Es viral y contagioso. Viven apretando el acelerador y mirando la hora para ir y volver, subir y bajar… El que está cerca de ellos acaba contagiado y herido. El doctor preguntó: ¿Dónde han dejado el ahora? Queman la vida con el fuego de la prisa. El tratamiento es la reflexión, poner en orden los valores. Antes de que la vida los frene y haya que parar por obligación.

Síndrome de la mujer sobrepasada (SMS). Se casan, los hijos, el hogar, las ausencias del cónyuge, la suegra, etc. Se van sobrecargando y están solas interiormente. ¿Con quién hablan? La situación es agobiante, la economía compleja, no ven la salida. El cuadro es parecido al de la depresión y como consecuencia: soledad, aislamiento, alcoholismo y obesidad. Cuadro complejo sin diagnosticar, vínculos de dependencia en todos los sentidos, el crecimiento personal se paraliza y es muy difícil tratarlas.

Existen muchos más síndromes: el del agonías continuo, el pesimista lo sufre en silencio el agonías reparte sufrimiento.

El síndrome de tengo que…

Síndrome de la culpa indiscriminada: buscan culpables por todas partes no analizan causas, no viven bien la vida, etc. etc. etc.

Chema conseja el libro de una psiquiatra que va por la 9ª edición: Marian Rojas Estapé, “Cómo hacer que te pasen cosas buenas”. Y contó una anécdota sacada de este libro escrita por Robert Waldinger, el cual inicia un estudio científico y concienzudo en 1938 con 724 personas, sacadas unas de dos grupos de alumnos de segundo año de la Universidad de Howard y otros de barrios pobres y marginales de Boston. Se les hace un seguimiento desde la adolescencia a la edad adulta. Hoy sigue el estudio con unos 60, con más de 90 años y con sus hijos. Sacó tres conclusiones:

1/ Las conexiones sociales nos benefician, la soledad mata, las personas asiladas son menos felices y mueren antes.

2/ La calidad de las relaciones con los amigos debe ser sana, bien elegida.

3/ Las buenas relaciones no solo protegen el cuerpo sino también el cerebro. Las personas aisladas pierden antes la memoria.

En conclusión, hay que adaptarse a lo que tenemos, aceptando la situación cuanto antes mucho mejor. Aceptarse a uno mismo.

Cuidemos los vínculos sociales. Dar trascendencia a lo importante, reflexionar, sacar conclusiones y aplicarlas. Ser amable, positivo, practicar ejercicio, marcarse objetivos y sentirse útil con todo lo que ello implica.

Y así, paso a paso fuimos llegando al final, sin olvidarse el ponente de un tema importante: ¿Rechazamos socialmente la muerte? ¿Por qué no hablar de calidad de muerte? Y nos aconseja que dejemos escrito lo que queremos que pase con nosotros, ahora que podemos, después puede ser tarde y decidirán otros. ¿Cómo se hace? Con el documento de voluntades anticipadas, se consigue en la consellería de Sanidad y por internet. Abogar por los cuidados paliativos de calidad.

Utilicemos el sentido del humor dice el doctor, dándonos una receta: “Un poco de realidad, unas gotas de cinismo, un toque de maldad, cuarto y mitad de mala leche, aderécese con sentido común y sírvase frío o caliente, al gusto.

Y con fuertes aplausos de complacencia comienza el coloquio también enriquecedor, tanto por las preguntas como por las respuestas que Chema Arzuaga iba dando disipando y aclarando dudas. Muchas gracias por tu preparación y buen hacer. Ha sido una charla magistral. Hasta siempre.

María Isabel López Villanueva.