Y A SU HIJO DE CUATRO AÑOS
Los hechos fueron grabados por una viajera. En el vídeo se escuchan amenazas de policías como «te juegas algo a que te bajas» y un total de ocho agentes para ‘reducir’ a una madre y a su hijo

SOS Racismo ha denunciado este domingo un nuevo caso racista en Madrid. Los hechos ocurrieron en la localidad de Móstoles cuando una mujer negra fue expulsada de un autobús interurbano a pesar de que tenía billete. La excusa, «exceso de aforo».
En el vídeo, que ha sido difundido en las redes sociales, se ve cómo la mujer cae por las escaleras del autobús tras intentar resistirse sin éxito a los empujones de agentes de la Policía Local de Móstoles, que tiran de ella para sacarla del vehículo. Mientras, a su lado, su hijo de cuatro años, que llorando ve cómo zarandean a su madre e intentan zarandearla contra el autobús.
Según relata SOS Racismo, la mujer, de Guinea Ecuatorial, quería coger el autobús para trasladarse hasta Camarena (Toledo), donde vive con su hijo. Esa misma mañana compró un billete de ida y vueltapara ella y su hijo, ya que ese trayecto, que sale de Méndez Álvaro y pasa por Móstoles, suele ser ser uno de los más concurridos. Sin embargo, y a pesar de tener billete para el autobús que salía el sábado a las 20:15 horas se quedó sin asiento. “Me dijeron que si compras el billete te garantizan una plaza sea como sea, pues el asiento ya lo tienes comprado”, explica Jennifer en conversación telefónica con ‘Es Racismo’.
El conductor no le ofreció ninguna otra opción, ni tan siquiera la devolución del importe, y le obligó a ella y a su hijo a bajar del autobús, a pesar de que una usuaria se ofreció a a ir de pie para que ambos pudieran sentarse. «Me dijo que estaba lleno y que no podía hacer ya nada», afirma, para añadir que el conductor «se limitó a amenazarme con llamar a la policía». Y eso hizo. A los pocos minutos varios agentes de la Policía Local de Móstoles llegaron pidiéndola que se bajara. «Los agentes de policía querían bajarme a la fuerza, me decían bájate, bájate, y al negarme trataron de coger a mi hijo para que me viera obligada a seguirle”, denuncia.
Los hechos fueron grabados por una viajera con su teléfono móvil. En el vídeo se escuchan varias amenazas de los policías como «te juegas algo a que te bajas» y un total de ocho agentes para ‘reducir’ a una madre y a su hijo. Finalmente Jennifer pudo regresar a casa gracias a la ayuda de uno de los usuarios del autobús, que al reconocerla por ser vecinos le dijo que en cuanto llegara a Camarena cogería su coche e iría a buscarla.
La joven aún no ha interpuesto una denuncia, aunque está sopesando hacerlo en los próximos días.
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