CRONICA DE UNA REUNION DE FANTASMAS

(Palos de ciego)

             La concejalía de Participación Ciudadana nos convoca a una reunión con uno de sus técnicos titulado al estilo Cifuentes en no se sabe que materia, pero eso sí “técnico” para que entre todos hagamos su trabajo En otras palabras, los consejeros del Consejo Vecinal además de pagar con sus impuestos el trabajo de los técnicos, han de participar en la confección de un Plan Estratégico de Participación Ciudadana y hasta ahí podíamos llegar. ¡Basta ya de cacicadas! En la fachada principal del edificio en el que nos convocaron reza: Ayuntamiento de Benidorm, en lugar de rezar: Peluquería de Benidorm, con lo cual hubieran evitado el equívoco en el que nos vienen sumergiendo.

A la reunión acudimos varios consejeros, pero curiosamente a pesar de tener a dos vicepresidentes en el Consejo, no acudió ninguno de ellos ¿pensaron que ya estaba todo el pan vendido?. No hubo pan. Estábamos en la peluquería y no había “masa madre”, no había “harina” y por no haber no había ni “hornero”, solo fantasmas, yo entre ellos. Los presentes no comemos de ese pan ¿o… Plan?

            Porque, “Al pan, pan y al vino agua”… y “Agua corrompida que no has de beber ¡pero que pagas!, déjala correr”… y eso es lo que hicimos, dejarla correr, pedir que elaboren un Plan serio, como Dios manda, que nos pasen un borrador del Plan y debatamos su contenido para llegar a un consenso. Yo, a pesar de haber asistido a dos cursos sobre Transparencia, Buen Gobierno y Participación Ciudadana en las universidades de Valencia y Alicante, no me considero técnico en la materia, y al igual que desde que tengo uso de razón hace muchos, muchísimos años, acudo a la peluquería para que me “tomen” el pelo y siempre me lo han tomado a mi gusto, no al gusto del peluquero. Lo que no admito es que me llamen al Ay-untamiento para tomarme el pelo a gusto del cacique de turno.

¡De eso nada! Los caprichos no se pagan con el dinero de los demás, sino con el propio. Así cuando una cosa no se sabe, en lugar de hacer experimentos, ¡se aprende!. El problema es que nosotros, los vecinos, estamos aprendiendo con el despilfarro económico del equipo de gobierno, algo muy importante, estamos aprendiendo A VOTAR. Ya estamos hartos de manipulaciones extemporáneas, de “afotos” con dientes blancos y bolsón repleto. Hartos de trincadas, de sinvergüenzas, de amoralidades, de corrupción.

Una vez mas ¡basta ya!, el equipo de gobierno que no pierda el tiempo haciendo las maletas, que se arrojen por la borda del barco cuyo enrolamiento les dieron las urnas, porque ese barco no es suyo, es de los ciudadanos, de los vecinos y en él deseamos una traversía clara y transparente, llevado su timón con mano firme y por personas normales y con la única ambición de trabajar con dignidad, decoro y nobleza para y por los demás. Nuestro barco no navega, hace tiempo que va a la deriva, las vías de agua inundan sentina y bodegas, y las cuadernas cansadas de crujir están a punto de quebrarse, la brújula se cambió por una ambición y avidez desmedidas y en el cuaderno de bitácora rezuman las arribadas forzosas. Iros de una vez por todas a navegar por otros mares, pero eso sí, enrolados en vuestro barco, con vuestras gaviotas.

Pienso que este equipo hace las cosas que hace, unas por falta de conocimiento, otras porque como no pasa nada… no obstante en el primer caso el desconocimiento crea complicidad y en el segundo supuesto, no pasa nada hasta que pase y ya no tenga solución. Remedio hay, puesto que políticos intachables, rectos y honrados quedan algunos, el problema es buscarlos, encontrarlos y votarlos. Todo llegará. A la política hay que llegar con los deberes hechos, con un objetivo claro y sereno, pensando: gané, he ganado y ganaré el pan con el sudor de mi frente, nunca jamás con el sudor ajeno.

Mi abuela falleció hace años, por lo que no tengo quien me aplauda por ello me ovaciono yo solo. Yo si tengo un Plan Estratégico de Participación Ciudadana, con tres capítulos: Mecanismos, Fomento y Procesos, con mas de once objetivos y mas de cuarenta y seis acciones a tomar. Pero es mío, no está en venta ni en subasta. Mi dinero, mis horas de estudio y esfuerzo me ha costado. Se de qué estoy hablando. Me enseñaron a construirlo y aprendí. Hay que empezar por los cimientos y los cimientos son la creación del Consejo de Ciudad, previsto en nuestro Reglamento de Participación Ciudadana (Capítulo III, Artículo 22, Sección Primera, Artículo 23) desde hace mas de ocho años y aprobado por unanimidad en un Pleno extraordinario el 19 de Julio de 2010.

Tengamos en cuenta que abrir las puertas a la participación ciudadana conlleva inevitablemente una cesión del poder conseguido en las urnas, y eso es en ocasiones muy difícil de asumir, sobre todo si empleamos un canuto para escribir la O.

Así que manos a la obra… a trabajar. Es un poco tarde pero si el canuto es bueno, la chirimita suena… ¡Ya va siendo hora de escuchar alguna melodía agradable!.

José Antonio Corachán Marzal