¿HABRÁ TELEFÉRICO?

Unos dicen que sí, otros dicen que no, pero ¿sabe Vd. amigo lector qué digo yo sobre el tema? Vamos, que está fácil la respuesta conociendo el paño, la masía y el cortijo (aquí no nos privamos de nada). Mi respuesta es:

Sin teleforraje, no hay teleférico.

Así de claro y… al grano: la pela es la pela y a ti te encontré… en el teleférico. Faltaría mas, a estas alturas de la legislatura y sin presupuesto y con una probabilidad poco probable de ampliar la vida laboral cuatro años más… Está claro, el bolsón hay que llenarlo como se pueda, tirando (llenando) por la izquierda, por la derecha o por el centro. ¡Trabajando no! Seamos serios. Siempre hay otros medios, hay favores, hay amiguetes, hay corruptelas… Ay, ay, ay. Volvamos a la claridad y transparencia acostumbrada y que no se entere nadie (excepto el bolsón).

El teleforraje puede ir por la vía directa o por la indirecta, no por la circunstancial porque en este caso no acompaña, son muchos a comer y el forraje no da para más. La vía directa viene a ser como el inyectable intravenoso, directo al bolsón, quiero decir al ay-untamiento, en cambio la vía indirecta es como el inyectable intramuscular, digo la dis-putación o pesebre político provincial, la acción es mas lenta pero a veces es mas segura, todo depende de la calidad (léase cantidad) de forraje.

Pero todo se andará, unos días de viento, otros de calor, algo de lluvia, la brisa marina del atardecer y… el forraje al sitio y el teleférico a la sierra que para eso está esperando años y años. Opino que es el momento adecuado, unos que se quieren quedar, otros que quieren entrar, otros que si si, que si no, que para eso está la política, que no tengo donde caerme muerto y de algo he de comer ¿o no?… Que nada que estoy seguro que habrá teleférico, hasta el extremo de que me apuesto un huevo, el de Colón -que gilipuertas no soy- tampoco está la cosa como para jugarse eso, porque luego no hay teleforraje, no hay consecuentemente teleférico y ¿que hago? ¿me quedo a medias? Pues no, que se quede Colón que para eso está.

El caso es que por otra parte, tengo un amigo, mi amigo Lázaro, que ya lleva tres artículos con el teleférico “pa lante”, y no… así no vamos a ningún sitio, parece mentira que lleves cuatro días por aquí (exactamente desde el deceso de Maesba) y no te hallas dado cuenta ya de la película. Desde que te caiste de la higuera que no te has recuperado del todo. Así andas diciendo insensateces tales como que el teleférico es bueno para Benidorm, no se que de cosas sobre la tercera ciudad turística, que si la oferta turística adecuada…

Que no Lázaro, que aquí eso no importa, que esta no es BENIDORM, esto es Benidorm y lo que hay que cuidar y fomentar impulsar y favorecer, son otras virtudes que desconoces, llevas pco tiempo aquí (desde el 28 de diciembre pasado) y no te ha dado tiempo de virtulizarte, de ponerte al día y lamento decírtelo… ¡se te nota! Tu vas como yo con el huevo (con el de Colón) de prestadillo y no es así. Acantilados inaccesibles, miradores de vértigo, parque natural ¡por favor! Eso parece el sueño de una noche de verano en la estación del Ave de Benidorm. Pura fantasía… Traca… Miseria y compañía.

Aquí lo que nos va es otra cosa, Casa Esquelética de Cultura, unos trileros alrededor, Estación de Autobuses sin viajeros, Centros Comerciales Fantasmas, bares con orden de cierre pero abiertos, y… y… bicicletas, muchas bicicletas que puedan utilizar de una vez por todas los nuevos carril-bici. Todo ello arbitrado por políticos con 20 años de experiencia.

Y con el Teleférico, lo dicho: Sin Forraje no hay Teleférico.

Jose Antonio Corachán Marzal