Benidorm

Benidorm.- IMPUGNACIÓN ACTA CONSEJO VECINAL

POR EL MAR CORREN LAS LIEBRES…

… Por el monte las sardinas, Tralará. Este estribillo de la canción infantil viene a cuento de lo que nos ocurre en Benidorm. Llevamos decenios con políticos cuya hoja de ruta es la dichosa cancioncilla y nosotros como buenos ciudadanos de 2ª, andamos oteando el mar en busca de las liebres que nunca aparecen y escalando montañas en busca de las sardinas, sardinas que no nadan porque a lo sumo que hemos encontrado son sardinas en lata con aceite o con escabeche, pero nada mas. Mentiras, mentiras y mas mentiras enlatadas en fácil palabrería y que sirven para ir viviendo del voto y mermar el bote.

Algunos vecinos cansados ya de otear el horizonte marino y agotados y extenuados buscando las prometidas sardinas, hemos tenido que “echarnos al monte” cual maquis de los años 40, olvidamos liebres y sardinas y nos quedamos con el Tralará: AL PAN, PAN Y AL VINO, VINO. ¡Basta ya de mentiras, embustes, falacias, cuentos, engaños y patrañas!.

Aquí todo es legal

Que más quisiéramos los vecinos que así fuera o fuese, que no existiera manipulación, que todo fuera legal, transparente y diáfano. Como no es así y el movimiento se demuestra andando, pues anda, he impugnado un acuerdo del que discrepo con alegaciones que puede ver el lector junto a estas líneas.

No sin esfuerzo, pero contando con la paciencia y constancia obligadas, vamos a ir tratando de desmontar el “tinglado” de esta ley me gusta y esta otra no me gusta. O te gustan todas las leyes o agarras el atillo, te vas a tu casa y dejas de molestar. Yo no estoy en desacuerdo, en disconformidad, con la creación del Defensor del Vecino, siempre y cuando se haga conforme a la ley establecida. siempre y cuando se atienda primero a lo mas urgente y perentorio -el Consejo de Ciudad- creación que considero mas perentoria y necesaria puesto que implica la participación activa de un mayor número de vecinos. Entiendo que la creación de los Consejos conllevan necesariamente la cesión de poder y el hecho de “ceder poder” siempre es difícil y duro para quien lo ostenta, pero es la democracia y la libertad, libertad que alcanza hasta la de mi vecino, sin invadirla, compartiéndola.

La impugnación para mí es un acto de libertad frente a la manipulación incontrolada. Manipulación es por ejemplo, decir que el asunto del Burguer King está terminado gracias a la Comisión de Escena Urbana cuando no es cierto, venimos defendiendo nuestro patrimonio desde la creación del Consejo Vecinal cuando no existía la Comisión Ciclista de Escena Urbana. Y digo ciclista porque considero que pedaleamos equivocadamente. Estamos confundiendo lo que es una ciudad turística con una ciudad residencial. Los turistas no llegan en bicicleta, viene en avión (Estación a 45 km. de distancia), por tren (Terminal a 40 km. de distancia) o por carretera y para mejorar esos accesos no hemos hecho nada, ni los vecinos ni la Comisión Ciclista.

La ciudad está mugrienta (nivel superior a sucia), deteriorada, desde los años 90 ha crecido en altura (mas ladrillo), estropeada, envejecida… ahora ¿va a mejorar a golpe de pedal? No se de ninguna ciudad turística que haya mejorado ampliando sus carriles bici. Modernizando, renovando, enriqueciendo su accesibilidad, sí. Pero para eso hay que contar con “políticos con vespa” -que no avispados- capaces de defender sus intereses que se supone son los de sus vecinos, trasladándose y defendiendo sus proyectos donde haga falta.

Mientras tanto, los que quedamos aquí, seguimos con el Tralará.

José Antonio Corachán Marzal

ACTA DE IMPUGNACIÓN