LAS CASAS QUE TITA THYSSEN NO TIENE A SU NOMBRE EN ESPAÑA

La casa tiene ocho dormitorios y sufrió una gran reforma hace unos años. En planta baja, se crearon dos nuevos salones en la zona que anteriormente se encuentra el garaje y la zona de cocina-oficio-lavandería. El salón principal toma la superficie de la biblioteca que se traslada a la situación del dormitorio principal. La nueva cocina se sitúa en posición Norte-Sur. En la planta alta se modifica la orientación de los dormitorios del personal de servicio. Se añade en este nivel un garaje con capacidad para tres automóviles y la nueva sala de calderas. La antigua zona de dormitorios del personal de servicio se reforma para dar lugar al área de vestidores del dormitorio principal.

Sobre dicha parcela, existe una edificación destinada a vivienda unifamiliar, que ocupa una superficie de 715 metros divididos en dos plantas y un sótano, además de terrazas y zonas de acceso. El resto del solar no construido se destina a zona libre de la finca.
3.293 metros cuadrados habitables
La tercera, y última, es en una parcela anexa a las anteriores. Tiene una superficie total construida de 857 metros cuadrados, divididos en dos plantas más una bajo cubierta, además de terrazas y zonas de acceso. El resto de los 3.000 metros de terreno se destina a jardines, piscina, pista de tenis y pádel-tenis, que no es lo mismo. Solo en La Moraleja, la baronesa tiene en superficie de vivienda 3.293 metros cuadrados habitables y casi la misma cantidad en parcela.
Ninguna de las casas está embargada ni tienen hipotecas. Y por supuesto, ella no figura

LA MANSIÓN MARBELLI

Imigolf S.L. también es dueña de la casa de Marbella de la baronesa. Situada en la urbanización Arroyo de las Piedras, tiene 432 metros y un terreno 5.145 metros. La casa, que limita con la de los Rothschild y al sur con las arenas del Mediterráneo tampoco tiene cargas ni Hacienda ha pasado por ahí.
La espectacular mansión es uno de los refugios preferidos de la baronesa y donde pasó sus mejores años con su marido viviendo todo el glamour de Marbella.

La desconocida casa en Barcelona

En Pedralbes, la baronesa tiene una casa en los alrededores de la calle Panamá en una parcela de 1.033 metros cuadrados. Aquí tenemos tres alturas que suman 900 metros útiles de vivienda. La casa, encalada en blanco, tiene también piscina y está en la zona VIP de la ciudad.

‘El Español’ desveló también que la baronesa tenía una propiedad desconocida en S’Agaró, esa zona llena de VIPs de habla catalana a la que Vanitatis dedicó recientemente un reportaje. En la zona que tan de moda pusieron en la década de los cincuenta estrellas del calibre de Elizabeth Taylor y Ava Gardner tiene una casa en permanentes obras de 257 metros con jardín y acceso directo a la playa.
Un hogar especial para la baronesa ya que en este presentó a sus hijas en sociedad. Otra desconocida propiedad de la siempre intrigante baronesa Thyssen, que mantiene su pulso con Hacienda y aún sigue con el ‘Mata Mua’ en su poder.
Borja, el gran nómada
La baronesa Thyssen ha tenido sus más y sus menos con su hijo Borja. Nunca fue de su agrado la mujer que eligió, Blanca, y a pesar de que son una de las parejas vips más consolidadas no ha aceptado del todo su relación. Borja y Blanca comenzaron viviendo en Barcelona, en un impresionante edificio de 3 plantas en el barrio de Les Tres Torres. El inmueble contaba con todas las necesidades y caprichos. A finales de 2010, y tal como publicó Vanitatis, Borja decidió donárselo a su hijo Sacha, porque Hacienda comenzaba a seguirle la pista.
La segunda parada de la familia fue Madrid, donde se instalaron en la lujosa urbanización de La Finca, en Pozuelo de Alarcón. Allí adquirieron una mansión de más de 800 metros cuadrados por la que desembolsaron más de 5 millones de euros, todo esto en uno de los momentos de mayor tensión con la baronesa y con la apertura de procedimientos penales en su contra. Ante esta situación, el matrimonio decidió en 2016 poner rumbo a Londres, para alejarse del foco mediático y estudiar la mejor forma de hacer frente a la Agencia Tributaria.
En Londres alquilaron una magnífica vivienda en un edificio de tres plantas del barrio de Knightsbridge, uno de los más lujosos y exclusivos de la capital. El matrimonio comenzó en mayo de 2016 una gran reforma del inmueble para dejarlo a su gusto y adaptarlo a sus necesidades. Las obras se alargaron hasta finales de agosto, y a principios de septiembre la pareja se instaló en su nuevo domicilio.
La vivienda se encontraba a pocos pasos del colegio de los niños, contaba con varios dormitorios, el primero en suite, un gran salón y zona de servicio. Todo ello en un edificio señorial de principios del siglo XX por el que según fuentes consultadas podrían haber desembolsado una cantidad cercana a los 6.000 euros mensuales. El lugar parecía perfecto, a una distancia más que razonable de España y lejos del foco mediático, pero parece que la pareja y sus hijos no se adaptaron y en enero de 2017 volvieron a España.
Blanca y sus cuatro hijos se reinstalaron en la mansión de La Finca y Borja se marchó a Andorra, como deseaba su madre, a vivir en una de las dos casas que la baronesa había comprado hacía algún tiempo para evitar tributar en España. Hasta el momento todo sigue así, y hasta que no finalice todo el entramado legal en el que está inmerso Borja no se esperan nuevos cambios de domicilio por temas fiscales