EL FISCAL Y LOS JUECES PASAN DE LA GRAVEDAD DEL HECHO Y NO ACTUAN POR OFICIO

Estamos ante un caso de mucha gravedad. La legionela aparecida en el Palacio de los Deportes de la ciudad denota el riesgo que tenemos todos los ciudadanos ante unos ediles, sobretodo los que ostentan el máximo poder, que no miran lo peligroso que es, para el ciudadanos de a pie, desentenderse de su obligación en el control de aquellos temas, tales como el agua o la basura, que pueden, como así ha sucedido, provocar un peligro serio para la salud de las personas.
No es de recibo que nada haya o este sucediendo, en este tema de la legionela, una intervención judicial POR OFICIO del fiscal local. Ha habido mas de 10 personas afectadas, una aún esta hospitalizada y ningún resorte judicial local se ha tomado el más mínimo interés en averiguar y descubrir a los culpables, ¡por que los hay!
De todos los problemas y líos que nacen por la gestión política carecen de importancia ante la gravedad de este que afecta a la SALUD de las personas. Estamos ante un comunidad de vecinos, empezando por el Consejo Vecinal, que no les preocupa nada, salvo su ego personal, y solo miran para si mismo, y nada hacen para ver el daño a terceros.
Por ello pido la total dimisión del equipo de gobierno municipal, así como del presidente del Consejo Vecinal y del técnico municipal encargado de tener controlado, con análisis periódicos, el estado de las aguas de las piscinas del Palacio de Deportes local.
Hoy se nos ha dado a los medio de comunicación dos versiones, diferenciadas entre si, sobre el tema. Los ediles de Sanidad y Deportes no dan confianza, aunque haya estado con un técnico. El edil no adscrito, Juan Ángel Ferrer, en su rueda de prensa, nos aporta documentos, mas de diez análisis, con los resultados de agua de las piscinas, años 2014 y 2015. Los ediles solo palabras y palabras que nada nos demuestran y menos dan confianza a los vecinos.
Lo digno, lo honesto y lo coherente es la DIMISIÓN de todos ellos.