Carta a Vicente

NO ES UN OLVIDO EL NO ESCRIBIRTE, TENGO FAENA PARA PARAR UN TREN

Son las 7 de la tarde de Noche Buena y lo hago para que veas que en, tan señalado día, me acuerdo de ti y mucho mas de Juanita, mí mujer.
Para mi es una noche como otra cualquiera. ¡Vicente sigo estando perdido sin ella!, desde que me la quitaron, fue un robo divino, pero robo al fin y al cabo, no celebro fiesta alguna. Mi hija Juani, la única que no me ha abandonado, esta empeñada en que baje a su casa, me he negado a ello. Yo no seria un invitado alegre y hablador. Yo, aunque alguien piense lo contrario, no me encuentro solo, cierto es que no tengo físicamente a Juanita a mi lado, ni en la mesa, menos en la cama. Sin embargo los recuerdos me salen uno detrás de otros y así paso, no esta noche, sino todas las del año.
Mi cena esta noche es especial. Mi hija Juani me ha traído angulas, de las buenas, y marisco, por lo que me voy a poner, como se suele decir, las botas.
No se que cena os dan ahí, pero seguro que no será mala.
Después de mandarte esta carta cerrare el ordenador y el móvil ya que me llaman para felicitarme la Navidad, y me dice, “junto a los tuyos”. Se olvidan de que estoy solo desde hace siete años. En fin. Es la vida que a mi me toca pasar y vivir y mientras Dios lo quiera no me queda mas remedio que aguantar.
Mañana iré al cementerio a ver a mi mujer y pasare a verte, después de estar con Juanita.Perdona que no te cuente nada del pueblo, si lo hago te vuelves a morir.
Saludos y que tengas unas buenas navidades.
Manolo