No resulta fácil entender todo lo que viene pasando en Benidorm en los últimos tiempos, pero especialmente en las últimas semanas, donde el intento de los partidos políticos de engañar y mentir a todos los ciudadanos está llegando a un punto donde las personas responsables, serias y comprometidas con Benidorm, tenemos que actuar con urgencia ante la descomposición de un gobierno y una oposición que son incapaces de remar a favor de las personas que vivimos en esta bendita ciudad y hacia quienes la falta de respeto impera cada día desde la Casa Consistorial. Y un servidor, como presidente de un partido que se presentará a las elecciones municipales de 2015, he decidido comunicar a los casi 300 afiliados de Ciudadanos por Benidorm y a mi junta directiva, que la actual situación nos obliga a tomar las riendas de la responsabilidad y empezar a actuar seis meses antes de las elecciones, como ya lo venimos haciendo desde hace 15, para detener el sinsentido de un alcalde y la mayoría de ediles que integran la Corporación, incapaces de hacer algo bueno y positivo para un Benidorm sin proyecto de futuro y con un lastre de corrupción y de inexplicables actuaciones en los últimos años, que de momento, ya han detenido el motor de una ciudad antaño modélica y ahora puesta en entredicho debido a estos gobernantes que la ciudad ni merece, ni puede seguir sufriendo un minuto más.
Hace unos días todos ellos, los veinticinco ediles, los de un bando y los del otro, salieron a la calle a pregonar a los cuatro vientos su política de transparencia, ésa que ni existe ahora ni ha existido para ellos desde que la democracia elevó su bandera en España. Se han reído todos ellos de todos nosotros al decirnos cuáles son sus patrimonios y cuáles sus ingresos, sus deudas y sus tejemanejes, mintiendo en una página web que pagamos todos, y mintiendo en un periódico municipal y una emisora de radio local que pagamos todos, pero a los que tienen acceso sólo los tribuletes del poder de este pueblo. Pisotean la Ley, incumplen ordenanzas, violan las normas elementales de una sociedad democrática, amedrentan a los ciudadanos con amenazas impropias en un Estado de Derecho, y todo, porque en el fondo se creen que son dueños de todos nosotros, de quienes les mantenemos con unos impuestos confiscatorios, y se creen los propietarios de nuestras voluntades y de nuestra libertad de expresión. Nunca Benidorm tuvo a sátrapas de tan alto rango que pudieron llegar tan altos ellos, ni tan bajo la ciudad por tener que soportarles a todos. Por eso nos obligan a ello, a lo que antes ya les expliqué.
Hace ahora un mes, el partido que me digno en presidir por voluntad de sus militantes empezamos a demostrar al pueblo de Benidorm que si estamos aquí es por pura responsabilidad y por estar convencidos de que la regeneración democrática de nuestro Ayuntamiento es posible con esfuerzo, sacrificio, mucho trabajo, honradez y sentido común. Ciudadanos por Benidorm elevó denuncia a la Fiscalía Anticorrupción por el “Caso Foietes”, y ya se está investigando por qué y quiénes han decidido en el Consistorio que algo que nos debería haber costado a todos 400.000 euros, al final tuvimos que pagar 3.600.000 euros, que es la cantidad con la que se ha indemnizado a los afectados, y que ahora todos los benidormenses tendremos que devolver debido a varios presuntos delitos cometidos por quienes nos gobiernan y su oposición…la de ahora y antaño, sólo que con los papeles cambiados.
Pero ese caso no es el único que ha colocado a Benidorm en el cénit de la corrupción, con un alcalde que sigue sin devolver lo cobrado indebidamente, y que el próximo 29 de enero tendrá que pasar por los Juzgados para explicarle, de nuevo, a la Justicia cómo hizo y por qué enchufó a ciento cuarenta y tres personas afines a su entorno pagándoles con dinero de todos nosotros, dinero que es sagrado, y que para estos gobernantes locales parece carecer de importancia. Fíjense ustedes si para ellos debe tener poca relevancia el dinero de todos, que en Benidorm se han presupuestado en los últimos treinta años la friolera de tres mil millones de euros, el equivalente a quinientos mil millones de pesetas. ¿Dónde están, qué se ha hecho con esa brutal cantidad de dinero que ha salido de nuestros bolsillos si la ciudad está peor que nunca?. Ni han hecho ni han pagado nada, pues a lo poco que en materia de infraestructuras se ha hecho, se debe y con intereses, de ahí la deuda inmensa de nuestro Ayuntamiento, que encima se atreven a negar. Aparte de los sesenta millones de euros que nos envió el Estado como auxilio, debemos aparte otros noventa por las deudas acumuladas. Algo verdaderamente incomprensible e imperdonable cuando hablamos de los representantes de un pueblo.
Ciudadanos por Benidorm se plantea personarse en el caso del enchufismo del alcalde como acusación particular, y si lo hacemos, será por responsabilidad y porque hemos decidido tomar las riendas de la caótica situación que nos invade. Y la plataforma que presido va a ir dando a conocer a todos ustedes el contenido de la auditoría económica que tanto PP, como PSOE y como CDL han decidido que no vea la luz pública, pero nosotros, desde nuestra modestia, iremos detallando con notas de prensa (que ya vemos y comprobamos que no publica ninguno de los llamados periódicos tradicionales) y comparecencias los entrebastidores de esa auditoría donde se desvelan múltiples irregularidades en todas las contratas de esta Ayuntamiento desde hace décadas. No duden ustedes que si encontramos delito en ello, llevaremos a la Justicia a sus responsables. Sólo así Benidorm podrá limpiarse de indeseables y sólo así Benidorm podrá recuperar el liderazgo que jamás debió perder. Y sólo así podrán ustedes comprobar la diferencia entre unos partidos políticos, los de siempre, que sólo se dedican a hablar, y Ciudadanos por Benidorm, que ha llegado con las ideas claras, acabar con hechos con esta lacra que ha arruinado nuestra ciudad y lo que es mucho peor, amenaza nuestro futuro.
Nunca los benidormenses hemos pagado más impuestos que ahora y jamás habíamos recibido peores servicios que ahora, unidos a una ciudad donde no hay un barrio conforme con sus infraestructuras, algunos con carencias que se arrastran desde hace décadas pese a esos quinientos mil millones de las antiguas pesetas que se han devorado algunos de los que se sientan en el salón de plenos. Nunca la ciudad había estado tan sucia pagando un potosí por unas contratas que incumplen sus compromisos, pero con las que nadie, ni los de ahora ni los de antes se han atrevido a zanjar y hacer trizas su vinculación, ¿por qué será?. Nunca los benidormenses habíamos recibido tantas promesas de actuaciones que no llegan por invisibles, y no llegan porque lo único que sí tenemos en el Ayuntamiento es una plaga de mentirosos compulsivos que se ríen de todos nosotros y no son capaces de darse cuenta que cuando los ciudadanos pagamos impuestos, es para recibir a cambio algo que llevamos demasiados años sin percibir ni captar, sino más bien todo lo contrario.
Y lo que es mucho peor y más grave. Estamos en manos de un grupo de políticos profesionales que todavía no se han dado cuenta de que ya no vale la mentira para convencerles a ustedes de que les voten. Nos prometen, una vez más, la nueva Comisaría, el nuevo Centro de Salud del Rincón de Loix, el Nuevo Parque de Foietes, la Finalización de la Casa de Cultura, y tantas y tantas mentiras dignas de una golfería sin fin y la catadura moral más baja que jamás hayamos conocido. Les da igual todo con tal de mantenerse en el poder cuatro años más. Nos hablan de unas infraestructuras que llevan años prometiendo y que, como si nada hubiera sucedido en los últimos años, a falta de menos de seis meses para las elecciones municipales, nos las vuelven a prometer. La historia se vuelve a repetir y allá cada uno de ustedes que quiera creérselas. En la responsabilidad personal de cada uno a la hora de elegir a quienes queremos que nos gobiernen en los próximos años, estará la penitencia de lo que finalmente nos suceda como colectivo y como vecinos de Benidorm.
¿Dónde está el Parque Tecnológico prometido por el secretario general de los socialistas locales, dónde está aquel Paseo de Poniente que el propio PP se comprometió a luchar para buscar financiación en Madrid, dónde están las obras de Jaime I prometidas por ambos bandos y que han agotado a vecinos y comerciantes, dónde están los museos prometidos y ese magnánimo Centro Cultural, dónde están esos accesos a la ciudad que aseguraban ejecutar todos los partidos locales si llegaban al poder, dónde está el proyecto de rehabilitación de la gran Avenida del Mediterráneo para la que ahora se pide financiación en Europa pese a haber lapidado aquí quinientos mil millones de pesetas sin haber invertido un céntimo en ella?
Podríamos seguir hablando de otras obras que no por menores que son, tienen importancia para los benidormenses, como son las de los encauzamientos de los barrancos que eviten tragedias que estuvimos a punto de vivir hace algo más de un mes, o las obra del instituto paralizado como el Pere María Orts i Bosch, símbolo de la corrupción de esta tierra, por no citar las obras del día a día en calles completamente agujereadas por baches, aceras que provocan caídas, farolas que no alumbran, o el pestilente hedor en los cuatro puntos cardinales debido a la falta de baldeo y limpieza viaria. No merece ya la pena seguir con esta cantinela porque con esta gente ya ha quedado demostrado que las quejas son indiferentes para ellos, que están a lo suyo, en lo suyo, en lo que nos han demostrado a todos que les interesa. Lo que merece la pena es pensar y concienciarnos de que usted, con su voto, podrá cambiar todo esto en próximo mes de mayo. Es muy importante que no olvidemos todo lo que nos ha pasado en los últimos años y como está la ciudad que a todos nos acoge, porque esta casta de listos y vividores harán todo lo posible para que no nos acordemos y les volvamos a conceder la legitimidad de las urnas. La fuerza de todos los que estamos hartos, uniéndonos, conseguirá lo que parece ser y está comprobado que es imposible a través del sentido común.
Por todo lo expuesto y por mucho más, Ciudadanos por Benidorm empieza a tomar las riendas con la responsabilidad que este pueblo merece, y desde hoy hemos decidido demostrar que somos un equipo de hombres y mujeres dispuestos a liderar el cambio que Benidorm necesita para lograr el bienestar y la riqueza de todos y cada uno de sus ciudadanos, ofreciéndonos a ustedes para todo aquello que necesiten en su devenir diario. Los actuales políticos, anclados décadas en su poltrona, nos han demostrado que no se preocupan por nosotros ni les importamos lo más mínimo. Hagamos lo mismo con ellos, porque nadie debe ocuparse de quien no se ocupa de nadie. Nos obligan a ello.

Benidorm a uno de diciembre de dos mil catorce