En Cataluña y otras comunidades el Turismo de Borrachera esta tomando aurge. Aqui, en nuetra ciudad, se ha empezado por algunos locales en donde empieza a practicarse alegando despedidas de solteros. Es importante tomar buena nota de las advertencias del edil socialista, no adscrito, Juan Ángel Ferrer.

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El Ayuntamiento no puede permitir el turismo de borrachera en mitad de la calle.
Hace unas semanas, en mi Facebook, colgaba las quejas en Barcelona por los turistas que alteran la convivencia urbana. Decía “Podríamos en Benidorm empezar a tomar algunas medidas de prevención para no tener que lamentarnos después. Es difícil saber como actuar, pero como ya hay algunos bares que facilitan este tipo de turismo, será mejor que tengamos una estrategia clara para evitar males mayores.”

Las fotos que hemos visto este fin de semana han mostrado lo que nunca debe ser la calle de Benidorm. Y digo la calle, porque todas estas escenas de turistas, como poco de mal gusto, se desarrollan en mitad de la calzada o en los retranqueos, que también son de uso publico. La calle es es de todos y, con estos espectáculos, solo la disfrutan unos pocos.

Los problemas por este tipo de turismo preocupan a ciudades como Barcelona, Magaluf, Lloret de Mar o Salou. En cambio, el gobierno municipal de Benidorm no tiene una acción clara para luchar contra estos shows, cuanto menos chabacanos, que se practican en mitad de la calle.

Hace también unas semanas, los que mandan se han gastado más de 50.000 euros en un estudio para posicionar la imagen de Benidorm. El lema es “cheap and chic”, barato y elegante. Este turismo podrá ser cheap pero en ningún momento es chic. Más bien es sick o filth (náusea o porquería).

Si basamos nuestro negocio turístico en la borrachera y en las juergas sin control en mitad de la calle, de poco han servido los esfuerzos de tantas generaciones en construir la ciudad turística más importante del Mediterráneo. Benidorm es mucho más que la imagen que se transmite con estas fotos.

Siempre decíamos que el peor turista es el que no viene, pero hay algunos turistas que es mejor que no vengan.

Hay algunos bares especializados en estos espectáculos. Se publicitan en webs del Reino Unido, ofreciendo alcohol barato, shows en mitad de la calle y varios días de desmadre por menos de 100 euros. ¿Es este el turismo que nos interesa para el futuro?.

Un turismo que no deja de beber por cuatro euros en mitad de la calle, solo puede espantar a muchos turistas que eligen Benidorm por sus otras muchas cualidades.

Habrá quien haga buen negocio utilizando la calle para llenar sus cajas. En cambio, el Ayuntamiento ha de pensar en el interés de toda una ciudad. No se puede gobernar solo para unos pocos.

Todas las fotos que hemos visto muestran las juergas en mitad de la calle. Son demasiadas las quejas de los que viven en esos edificios y de otros turistas, para que el Ayuntamiento se quede de brazos cruzados. No se trata solo de que la Policía actúe como debe, sino de una estrategia de mayor calado que haga caso de los estudios que se pagan con mucho dinero público. Benidorm puede ser cheap and chic, pero no puede venderse como el destino de la borrachera y del todo vale.

Han hecho una ordenanza para quitar a los mendigos de la calle y que no den mala imagen. En cambio, dejan que unos turistas indeseables se aprovechen de la vía publica, beodos, mostrando lo que a los demás no les hace falta ver y con el Ayuntamiento mirando hacia otro lado.

Parece que en unos días, va a llegar el primer crucero a Benidorm. ¿Es esa la imagen que queremos dar de nuestra ciudad? ¿Qué contaran esos cruceristas de una ciudad que tiene la calle tomada por unos gamberros enseñando sus fiestas de alcohol y sexo en mitad de la calle?.

No se trata de volver al falso puritanismo ni a los sermones de púlpito de otras épocas. Se trata de poner sensatez y, sobre todo, de cuidar la imagen de nuestra ciudad. Bastante mal está la escena urbana como para añadir estos espectáculos deplorables.

Salvar el negocio de la temporada con esta bazofia, no creo que sea el modelo de turismo que precisa Benidorm. Es pan para hoy y, seguramente, hambre para mañana.

El Ayuntamiento de Benidorm debe actuar con firmeza y con rapidez. Son varias las competencias municipales las que tienen responsabilidad, especialmente seguridad ciudadana y turismo. Con estas fotos, ya se han pasado de la raya y no olvidemos que la raya acaba donde empieza la calle, una calle y una ciudad que es de todos, no sólo de unos pocos.

Benidorm, a 30 de septiembre de 2014
JUAN ANGEL FERRER AZCONA
CONCEJAL NO ADSCRITO