SOLO BUSCAN SALIR EN LA FOTOS ESTOS GOLFOS DE LA POLITICA

Maesba

Desde que apareció PODEMOS se habla mucho de la Casta política en nuestro país y aunque ahora nos rasgamos las vestiduras al ver la golfería, dentro de la política, que impera en nuestro país en un tema, como el de los “Gemelos 28” que se podía haber evitado. Tenemos que recordar que cuando los edificios estaban en su séptima planta Costas mando su paralización y lo puso en conocimiento de nuestras autoridades municipales. Esta pandilla de golfos políticos de la villa no hizo nada para defender los intereses de todos los contribuyentes locales. Los intereses que defendieron fueron la del empresario  Ballester y, dentro del sector de este gremio también existe la CASTA, ahora sale una sentencia del Supremo que habría que cumplir. Las leyes en nuestro país son buenas, muy buenas. El mal esta en quienes se encarga de utilizarla y emplearlas, los jueces, que tardan una eternidad para dar una sentencia, como ocurre ahora.
Cabe también recordar la tomadura de pelo del empresario Ballester sobre el denominado Balcón Punta Llisera. En su día se hizo el concurso, se pago a quien lo gano, y nada se ha hecho. No se ha hecho nada porque la Casta política local, los presuntos golfos políticos que estamos sufriendo, no les ha dado la real gana defender a la ciudad. Lo podían haber hecho cumpliendo, en su día, el mandato de Costa y paralizar la obra.

Claro que la culpa no es del todo de estas pandilla de políticos, los ciudadanos, los contribuyentes, también la tienen y mucho. En esta bella ciudad no existe en concepto de unidad de PUEBLO. Los que han venido aprovechándose de los cargos públicos han sabido DOMESTRICARNOS y AMAESTRARNOS y nos han quitado el acto, el don, de reclamarles, exigirles, que trabajen, no para hacerse fotos y llenar las calles de macetones de flores o colocar ahora 100 bancos de maderas. Nos han convertido en presuntos borregos o corderos sin saber reaccionar ante tanta porquería, despilfarro y metedura de manos.
Los “Gemelos 28” están ahí y dudo mucho de que esa sentencia del Supremo se llegue a cumplir ya que la corrupción política existente es sólida y esta fuertemente amparada por la gran mayoría de las instituciones publicas.
Nada se va ha conseguir pero, como digo al principio, “nos rasgamos las vestiduras viendo la golfería existente en la presunta chusma política que tenemos y que, ¡es lo peor!, en el 2.015 volverán a ser los mismos lo que se presente, no solo por “AMOR A BENIDORM”, sino por la presunta rentabilidad económica con que se benefician.