El Mundo Islámico está muy convulsionado, y no sólo por la primavera árabe de numerosos paises. Al amparo de la defensa de su religión, han surgido una serie de movimientos yihadistas, más bien terroristas, en diversos puntos del planeta. Los Talibanes andan por Afganistán y Pakistán, los de Al Qaeda igual están por Asia que que en Africa, o golpean en Europa o América. Lo último es la aparición del Estado Islámico de Irak y de Levante (ISIS), una facción más extremista que Al Qaeda, que ya es decir, que pretende instaurar un Califato Islámico en Irak y Siria, donde el terror y la ley islámica se imponga. Ya ocupan parte de Siria, aprovechando la insurgencia surgida contra el régimen de Bashar al Assad. Irak, tras la caida de Sadam Hussein y la retirada de EEUU, es un auténtico caos, y aprovechando el desconcierto de chiitas, sunitas y kurdos, los yihadistas de ISIS han decidido extender su califato tomando ciudades tan importantes como Mosul o Tikrit, y poniendo el punto de mira en Bagdad. Los Kurdos Iraquíes huyen al Kurdistán Turco. Estos, que alimentaron a los de ISIS en Siria para desestabilizar a al Assad, ven como se les vuelve en contra ese apoyo. Los Iraníes vecinos, de mayoría chiita, afilan sus armas para defender sus lugares sagrados en Irak y a sus correligionarios. Estados Unidos, que se tuvo que retirar, está dispuesto a apoyar al régimen Iraquí para que combata a esa facción de Al Qaeda. ¿Hará lo correcto?.
Soy católico y cada día me cnvenzo más de que cuanto más lejos esté la religión de la política, mejor. Europa ya vivió muchas guerras de religión y muchas cruzadas. Muchas personas inocentes murieron, pero por fortuna hemos avanzado y aprendido a convivir unos con otros respetando las creencias de cada uno. Africa y Asia se desangran por culpa de unas creencias religiosas. No es justo y no creo que haya un Dios en este mundo que apoye tanta barbarie.
Religión y política deben seguir caminos diferenciados, lo contrario es barbarismo.

Francisco Javier Reverte Lledó