Lejos de gastar en imagen y electoralismo, se deben acometer las verdaderas necesidades de la ciudad y de los ciudadanos.
Agustín Navarro ha propuesto modificar las condiciones de la financiación de la deuda del pago a proveedores. Aprovechando una Resolución del Ministerio de Hacienda, el Ayuntamiento podrá obtener una bajada en el tipo de interés y además un año de carencia supletorio. Hasta el verano de 2015 no se empezará a amortizar el capital de 57 millones de euros y los intereses se situaran al 1,31 % frente a un 6 % que se habían firmado los préstamos en 2012.
Esta modificación supone que en el año 2014 no se van a gastar 4 millones de euros en la amortización de esta deuda. Si bien una solución sería bajar los impuestos, especialmente el I.B.I., se ha traspasado el plazo para bajar el tipo impositivo para este año 2014. Por tanto, el Ayuntamiento dispondría de 4 millones de euros que hacen que se puedan resolver algunas de las principales prioridades que se le plantean a la ciudad y a sus ciudadanos.
La proximidad de las elecciones municipales en mayo de 2015, puede que incline al equipo de gobierno a realizar gastos superfluos o de marcado perfil electoralista. Las inversiones en marketing y de imagen de Gema Amor y del socialista que fuese candidato, podrían olvidar las necesidades más perentorias. Por ello, cabe reflexionar sobre el destino de estos cuatro millones de forma que sirvan para un verdadero avance en la calidad y bienestar de los ciudadanos.
Son muchos los puntos que precisan de un verdadero impulso político para solucionar las principales carencias de la ciudad. Si bien la escena urbana, tras su abandono por las diferentes franquicias del Partido Popular, es un talón de Aquiles de la situación urbanística, es imposible abordarla en su conjunto con estos cuatro millones. En mi opinión, cabría invertir este dinero en estas cuestiones:
1º. Creación y puesta en marcha de un comedor social, “para atender a personas con problemas de integración social y/o económica”, tal como establecía el Programa Electoral del PSPV-PSOE.
2º. Implantación de “la gratuidad de los libros de texto en el primer ciclo de Educación Primaria”, como también se prometía en ese Programa Electoral. Cabría matizar que se debería introducir criterios de renta en la distribución de este presupuesto, para evitar desequilibrios entre las familias con suficientes recursos económicos frente a otras más desfavorecidas. Asimismo, incrementar las ayudas de forma suficiente en comedores escolares, alimentación infantil y transporte escolar para que no haya desigualdad de oportunidades entre los niños y niñas de Benidorm.
3º. Incremento en las subvenciones a las entidades que presten servicios de emergencia social, como las que atienden a enfermos, discapacitados, dependientes, infancia, tercera edad, educación, etc.
4º. Puesta en marcha del Museo Boca del Calvari, tras la finalización de las obras en el edificio. Se debe tratar de una gestión municipal, permitiendo la contratación de una empresa externa para los servicios auxiliares de vigilancia, limpieza o logística.
5º. Urbanización de algunas calles que se encuentran deterioradas y con deficiencias graves en su escena urbana. Cabe resaltar la calle Calpe en La Cala, la calle Zamora en su conexión con la avenida de Juan Fuster Zaragoza en el Rincón de Loix o la Avenida de Italia, que permitiría conectar el final de L’Aigüera con el Barrio de Imalsa. Por parte de Agustín Navarro se han prometido estas obras en numerosas ocasiones y los vecinos no pueden sentirse defraudados una vez más.
6º. Mejoras en el acceso al Palau d’Esports L’Illa, con un vial amplio que permita la doble dirección de vehículos de forma holgada y una aceras para peatones y un carril bici de suficiente anchura y seguridad. En estas obras y en las del párrafo anterior, se podría recurrir al plan de ayudas de la Diputación de Alicante, que alcanza hasta un 50 % de los costes.
7º. Plan de mejora de la Avenida Jaime I, tras su desmantelamiento con motivo de las obras no iniciadas del Parking subterráneo. A pesar de la intención de realizar una encuesta, es más que evidente que los ciudadanos y las empresas no requieren de un estacionamiento en esa zona, ya que no se formularon reservas para plazas y la mayoría de edificios aledaños o bien tienen su propio parking o la capacidad adquisitiva de sus residentes es escasa o hay un importante colectivo de emigrantes en viviendas de alquiler.
Esta es una relación de inversiones capaz de acometerse con los cuatro millones que este año no tendrán que pagarse a los bancos. La mayoría de estas inversiones ya las he solicitado mediante escritos al Alcalde o mediante mociones al Pleno. Ahora, no hay excusa para su dotación y su puesta en marcha. Se trata de necesidades que, desde mi punto de vista, precisa la ciudad y están reclamando los ciudadanos.
Sin embargo, todo es susceptible de mejora y de rectificación, siempre que esté basado en el interés general y en la respuesta a las demandas de los ciudadanos.
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