Todavía recuerdo los años previos a la crisis, 2003-2007, estàbamos en la cúspide, derrochadores, con los bolsillos desbordados de billetes; era prácticamente imposible encontrar trabajadores españoles para cualquier faena, daba igual que fuera para recoger naranjas, cuidadar personas dependientes, arquitectos o médicos. Por eso tuvimos una avalancha de inmigrantes que hizo que nuestra población pasara de 40 millones de habitantes a 47 en la primera década del siglo XXI. Todo ésto provocó un colapso en la Sanidad, la Educación, los Servicios Sociaes…, ; a la vez, el precio de las viviendas subía y subía como la espuma. El paisaje urbano no era de verdes árboles, sno de gruas y más gruas, con sus ladrillos y cemento correspondiente.
Pero ya en 2005-2007 se mascaba que ésto no podía seguir así, que en cualquier momento habría reventón. Y reventaron las costuras, y donde antes faltaban trabajadores, ahora empezaban a sobrar. Al español ya no le importaba recoger naranjas. Tuvimos la desgracia de que los astros coincidieran, y tanto a nivel nacional, como autonómico y municipal, coincidieron, como regidores de nuestro destino, gobernantes que no supieron llamar al pan, pan, y al vino, vino. No tomaron medidas en su momento, y por eso el período 2007-2011 es para olvidar. Hemos estado a un tris de saltar por los aires.
No pretendo apoyar a Rajoy y su gobierno, que tantas decepciones han provocado a muchos de sus votantes, pero justo es reconocer que después de poco más de dos años de gobierno, el aire que se respira parece otro. Nos llegan cifras todos los dias de que algo se mueve, y en sentido positivo, en nuestra economía: las previsiones de crecimiento del PIB rondarán el 1.5% en el 2014 y 2015, vendemos más que nunca en el exterior, el turismo está que se sale, somos el motor, y nunca mejor dicho, en ventas de coches a nivel europeo en el último trimestre, las gruas han vuelto a aparecer en el paisaje de algunas zonas del sur de Alicante, se venden más electrodomésticos, la prima de riesgo anda por 151, algo impensable hasta hace muy poco, los bancos ya te ofrecen hipotecas y empiezan a prestar, hasta el empleo ha empezado a crecer.
Todavía tenemos puntos débiles, como es nuestro endeudamiento, nuestro alto gasto público (y aquí me refiero al mal gastado) y sobre todo muchos parados. Pero ahora si tengo claro que de ésta salimos. Las cifras de nuevos empleos de Abril, así como la EPA del primer trimestre del año, barrunto que van a ser muy positivas, y así será en buena parte del año.
La brisa que he notado esta Semana Santa, la que entra ahora mismo por el porche de mi casa, creo que es la misma que sopla en la economía de nuestra España. Buena fata nos hacía, que dure muchos años. Sonrío; sonrían, por favor.

DESDE MI OTERO
desdemiotero.blogspot.com

Francisco Javier Reverte Lledó

Haz clic aquí si quieres Responder o Reenviar el mensaje