Aunque el día ha amanecido gris y lluvioso, estoy contento. Como firme defensor del azúcar como suplemento alimenticio, y ante las campañas de la industria química por desprestigiar este componente de nuestra dieta alimenticia, para sustituirlo por otros edulcorantes, no exentos de cierta toxicidad, aparte de no alcanzar nunca el delicioso sabor del azúcar, me satisface enormemente la noticia que aparece en algún medio de comunicación. Y es que, en un futuro próximo, tres años, se pondrán en el mercado unas baterías para móviles, tabletas, etc., alimentadas por un azúcar con una alta densidad energética, que sustituirán a las actuales de Litio, mucho más costosas y nada ecológicas.
Todo gracias al esfuerzo investigador de unos científicos de Virginia, que trasladando el modelo de un proceso natural al campo científico, utilizando métodos sintéticos, no tóxicos, consiguen un resultado más que positivo y beneficioso para la humanidad. Creo que por ahí está el camino, en oobservar, analizar y estudiar lo que ocurre en la naturaleza para poder sacar el máximo provecho, sin lesionar más a nuestro achacoso medio ambiente.

Francisco Javier Reverte Lledó